Desarrollo de sistemas biométricos: un paso en el futuro de la seguridad personal

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En muchos lugares del mundo ya no es necesario presentar una tarjeta de identificación, ni hacer una cola para pasar los documentos por una banda magnética, a fin de entrar a lugares públicos o realizar algún tipo de transacción. El desarrollo de sistemas biométricos da un paso en el futuro de la seguridad personal.

Pero, ¿a qué nos referimos con los sistemas biométricos? Con el desarrollo de sistemas biométricos nos referimos a usar las características naturales de los seres humanos para el diseño de estructuras de seguridad, patrones formados con rasgos físicos inalterables que permiten un proceso de comparación del rostro, la voz o el iris de los ojos, entre otros aspectos.Un poco de historia

A pesar de que los sistemas biométricos no son algo nuevo. La implementación en ambientes regulares, e incluso aún en muchos países, son algo novedoso. Sin contar con que los avances alcanzados en la actualidad superan con creces muchos de los sistemas biométricos tradicionales, como lectura de huellas dactilares.

En la actualidad el desarrollo de sistemas biométricos incluye muchos campos, desde la seguridad hasta los videojuegos. Podemos ver, por ejemplo, numerosas consolas que funcionan con reconocimiento facial. Igualmente en la seguridad informática, en donde el computador hace reconocimiento de los rasgos del usuario antes de dejarlo ingresar en el sistema.

Dentro de los alcances que podemos enumerar está el desarrollo de sistemas biométricos de 2D y 3D, los sensores biométricos MEMS que permiten un control total del dispositivo, sin necesidad de oprimir un botón. Reconocimiento de iris y el reconocimiento vascular.

Al alcance de la mano

Algo interesante sobre el desarrollo de sistemas biométricos, es lo relacionado con su aplicación en el ‘mundo real’. Es decir, en la cotidianidad. Para ir al banco, realizar los tramites, ingresar en lugares públicos como bibliotecas, etc. En muchos lugares, esto es una realidad. Sin embargo, en la mayoría del mundo es apenas una propuesta en desarrollo.

No obstante, es un aspecto que lentamente toma fuerza, porque por un lado está el crecimiento constante de este tipo de tecnología, y por el otro la necesidad de simplificar los procesos, al igual que la insuficiencia de un ambiente seguro. En los días por venir el desarrollo de sistemas biométricos se convertirá en algo tan natural, que no habrá de extrañarse cuando leamos los periódicos o paguemos las cuentas en el banco con un simple movimiento de las manos.

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