Primeros modelos y funciones de las cámaras IP
Se les da el nombre de cámaras IP a una clase especial de cámaras de video digitales generalmente utilizadas para vigilancia y sistemas de seguridad, las cuales pueden enviar y recibir datos a través de una red de Internet. La denominación proviene del término inglés “Internet Protocol Camera” (cámara de protocolo de Internet), el cual hace referencia a la característica que las distingue de las utilizadas en circuitos cerrados de televisión.
Existen dos clases de camaras IP, las centralizadas y las descentralizadas. Las primeras necesitan estar conectadas directamente a un sistema de registro o grabación central de datos. La empresa Axis Communications lanzó al mercado la primera versión de estos dispositivos llamada Axis Neteye 200 en el año de 1996. Tres años más tarde, la compañía comenzó a utilizar el sistema operativo Linux para programar y ejecutar las funciones de la cámara, además de que hizo pública la información básica para modificar algunas de sus funciones. Esta iniciativa tenía la intención de abrir el mercado y fomentar la creación de aplicaciones compatibles con su producto.
Por otra parte, las cámaras IP descentralizadas comenzaron a producirse en 1999 bajo el sello Mobotix. Al igual que las mencionadas anteriormente, estas cámaras contaban con programación en Linux para las funciones de video y grabación, debido a lo cual no requerían licencias especiales de software. A diferencia de las cámaras centralizadas, éstas no necesitan estar conectadas a un sistema de grabación pues cuentan de origen con funciones de almacenamiento de datos directa a dispositivos tales como discos duros, memorias flash o redes de almacenamiento compartidas.
Actualmente, las cámaras IP cuentan con funciones analíticas de video, lo cual les permite activarse automáticamente al detectar ciertos movimientos programados. Debido a esta característica, un dispositivo de este tipo iniciará sus funciones si una persona entra en un determinado rango de visión o si un automóvil entre a una calle en sentido contrario. El primer modelo con esta particularidad apareció en el mercado en el año 2005 producida por la compañía Intellio.
Entre las características que hacen preferibles las cámaras IP a las convencionales de circuito cerrado destacan su mayor resolución y adaptabilidad a dispositivos de alta definición; se puede acceder a su contenido a distancia a través de computadoras, teléfonos inteligentes y otros aparatos; es posible cambiar su ubicación ya que funcionan a través de una red IP, y cuentan con funciones para transmitir audio en ambos sentidos, lo cual proporciona un canal de comunicación con lo que se está viendo.
Algunas de sus desventajas son que tienen un costo elevado si la instalación es de unos cuantos aparatos y requieren de mucho espacio de almacenamiento si se desea conservar la información. A pesar de que cuentan con un alto nivel seguridad en la encriptación de datos, existe la posibilidad de que la señal sea intervenida y puesta al alcance de grupos o personas que puedan hacer mal uso de ella.
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