Nuevas reglas de seguridad para el equipo de EPN
Escrito por: Mariel Hernández Maldonado
Actualmente como país vivimos una crisis social y política muy grave, pues poco a poco los ciudadanos han dejado de confiar en los mandatarios, gran parte gracias a las redes sociales que se han encargado de mostrar un lado de la política al que antes no teníamos acceso, que es el más crudo y honesto. Así desde que el actual presidente Enrique Peña Nieto tomó su puesto hubieron protestas que se han salido de control conforme pasa el tiempo llegando a su máximo con el caso de los 43 desaparecidos de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos ubicada en Ayotzinapa Guerrero.
Hace ya casi 6 meses que los estudiantes desaparecieron en Guerrero y desde ese entonces no se han detenido las protestas a nivel mundial siendo la última la que marchó por Reforma encabezada por las madres de los estudiantes conmemorando el Día Internacional de la Mujer.
A razón de todas estas protestas, el Estado Mayor Presidencial, como augurando lo peor, se dio a la tarea de elaborar nuevos protocolos de seguridad para proteger a EPN y a su familia en cualquier momento; en este documento se autoriza el uso de la fuerza letal solamente en casos de peligro extremo para garantizar el bienestar del máximo representante del poder mexicano con la promesa de siempre mantener la imagen pública del mismo.
Para darle cuerpo a este nuevo protocolo se tomaron como base los modelos de cumplimiento de Ley Federal estadounidense y el de la Universidad de Illinois, se sustenta jurídicamente en argumentos de las Naciones Unidas y las secretarías de Defensa Nacional, Marina Armada de México, la Policía Federal y la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal.
Es gracias al respaldo de estas instituciones que se ha facultado al EMP a utilizar la fuerza letal “en caso de ser necesario”, efectos para los cuales se han dividido los niveles de amenaza en 5 colores que representan una situación y ameritan una acción:
- Azul. En este nivel se encuentran las personas no violentas que presentan quejas habladas y pancartas con peticiones, para este color se utilizan guardias civiles desarmados que tratan de persuadir a las personas por medio del diálogo.
- Verde. En este nivel o código se encuentran las personas que utilizan la resistencia pasiva, presentando actos esporádicos de violencia; en este caso se recurre a las fuerzas estatales y federales para poder tener a los manifestantes a distancia, de continuar se aplican tácticas de sumisión sin dolor y el uso del diálogo.
- Amarillo. Este código se utiliza para los grupos de personas que presentan resistencia agresiva inicial y actos esporádicos de violencia, ya sea contra las fuerzas de seguridad o contra propiedad federal. En este caso se pueden realizar técnicas de sometimiento con dolor, inmovilizadores eléctricos, restricciones e irritantes químicos como gas lacrimógeno y gas pimienta.
- Naranja. Este código se utiliza cuando las personas de un grupo presentan resistencia agresiva grave con riesgo de vulnerar el segundo círculo de seguridad del presidente lo que representa una amenaza mucho más grave, por lo que se puede recurrir al uso de las armas de impacto como bastones, apretamiento, técnicas de agarre, cañones de agua y bastones. En este código los golpes están justificados.
- Rojo. Este es el código más grave y es aquel que cuenta con individuos que oponen resistencia letal inminente, esto es que amenacen de muerte al grupo de seguridad o al propio presidente, caso en el que se puede utilizar cualquier arma de calibre grueso, equipos de reacción inmediata y apoyo del ejército, fuerza aérea y policía federal.
Con estos nuevos reglamentos se busca proteger el bienestar del presidente de la nación, así como de su equipo y su familia siempre -a decir de las autoridades- garantizando los derechos humanos en todo momento.
Deja un comentario