¿Qué es un circuito cerrado de TV?

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Entre los dispositivos de seguridad más comunes pero también más eficientes se encuentra el circuito cerrado de televisión, mejor conocido por sus siglas CCTV. Es uno de los mejores métodos para mantener bajo observación constante una o varias zonas, ya sea que se trate de un edificio de oficinas, un almacén o su domicilio.

El sistema de circuito cerrado opera mediante la instalación de cámaras de videovigilancia conectadas a una central que graba la actividad en una determinada área. Cada una de las cámaras opera de manera independiente a las demás, por lo que pueden ser apuntadas o dirigidas desde una base de control; gracias a esta función, es posible mantener bajo observación varias localizaciones, o bien, observar una misma zona desde distintos puntos de vista.
El centro de control tiene la finalidad de manejar las cámaras, dirigirlas y atender cualquier movimiento o actividad inusual. Cuenta con monitores en los que se transmiten en tiempo real las imágenes captadas por los dispositivos, así como una central de grabación en la que se almacena toda la imagen recogida por las cámaras. Es importante mencionar que no en todos los casos se cuenta con el sistema de grabación 24 horas, especialmente en los equipos que se instalan en casa, en los que regularmente se activa en sistema sólo cuando se utiliza el interfón.
La instalación de las camaras de seguridad suele ser sencilla, excepto en los casos en que se desea que la cámara no pueda ser vista; en estas circunstancias, se deben realizar trabajos de remodelación en las áreas donde se colocan los aparatos y después cubrirlos. Para ocultar las cámaras se utilizan dos recursos, principalmente:
El primero son los espejos circulares que a veces se pueden ver en algunos establecimientos. Detrás de muchos de estos espejos hay cámaras ocultas. El segundo son las esferas opacas que se colocan en el techo; éstas esferas pueden ser vistas e identificadas como cámaras, pero dado que son ahumadas no se puede saber en qué dirección está apuntando el aparato.
La mayoría de las compañías de seguridad que se encargan de colocar los sistemas de circuito cerrado son también las encargadas de operarlas. En caso contrario, es importante recurrir a empresas de vigilancia que cuenten con personal capacitado para operarlas y para darles mantenimiento. El costo de instalación es alto pero el rendimiento y la duración de los equipos es larga, con el mantenimiento adecuado.

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