Cómo reducir la contaminación acústica en carreteras

La contaminación acústica es un problema de preocupación pública, por lo que es importante destinar soluciones para controlarlo y afectar lo menos posible a los seres vivos que se exponen a niveles altos de ruido. De acuerdo con Héctor Toledo Teja, en áreas urbanas y carreteras, el tránsito vehicular es la principal fuente de este tipo de contaminación debido al paso continuo de transporte rodado y su impacto en el suelo.

Para conocer el impacto del ruido, es necesario realizar mediciones por medio de un sonómetro o decibelimetro, que puede utilizarse en las horas de mayor tráfico vehicular y, con ello, determinar dónde se requiere implementar una solución que amortigüe el impacto negativo para la población.

De acuerdo con Carlos Alberto Miguel Hernández Verástegui, una de las soluciones más eficaces para reducir el ruido en las carreteras son las barreras o paneles acústicos absorbentes, especialmente cuando se realizan trabajos de construcción vial, ya que la maquinaria industrial alcanza ruidos muy altos, que pueden afectar a la población. Asimismo, los obreros que trabajan en este entorno requieren de soluciones para proteger sus oídos, como tapones.

Las barreras acusticas son la solución indicada para mantener la llamada calidad acústica en zonas de alto tránsito vehicular, donde el ruido de los locales comerciales, restaurantes, bares y la música a un volumen muy alto pueden exacerbar el problema al elevar el nivel de ruido en el ambiente.

El ruido es la sensación auditiva generalmente desagradable y molesta; se considera como tal cuando el sonido supera los 65 decibelios (dB) durante el día y 55 dB por la noche. Dentro de los malestares que provoca la contaminación acústica destaca: irritabilidad, falta de concentración, insomnio, ansiedad, estrés y, en los peores escenarios, hipertensión arterial y pérdida auditiva.

Las barreras acústicas pueden disminuir significativamente los niveles de ruido al absorber las ondas sonoras y atenuarlas; están conformadas por un núcleo aislante de lana de roca, caras metálicas y uniones machihembradas, lo que significa que son modulares y pueden desensamblarse y colocarse en cualquier lugar donde se necesite. Por ello son ampliamente utilizadas en la construcción de obras viales.

Además de carreteras y caminos, las barreras acústicas pueden instalarse en zonas de mucho ruido, como fábricas, centrales de energía, transformadores eléctricos, bombeadores de agua, reguladores de gas, zonas de despegue en aeropuertos y helipuertos, entre otras fuentes de molesto ruido.

Dentro de las ventajas de estas barreras encontramos:

  • Eficiencia en aislamiento acústico
  • Resistencia mecánica, a la corrosión y humedad
  • Durabilidad
  • Ligereza
  • Rapidez en la instalación
  • No son inflamables, por lo que son seguras en entornos industriales
  • Se pueden reparar fácilmente en caso de ser vandalizadas

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